Manolo Alcázar —con jovial humor y perspicacia— se ha propuesto en este, su Antivirus mental…, echarnos una mano para que aprendamos a pensar y vivir mejor. Desfilan así por estas páginas tanto la lucidez y rigor de Aristóteles como la agudeza mental de G. K. Chesterton y otros pensadores más recientes. Con sana rebeldía, nos seguimos formulando las viejas preguntas: ¿somos capaces de aprehender la elusiva apariencia del mundo? ¿Estamos obligados a aceptar que la única verdad aceptable es la que afirma que no hay ninguna? ¿Acaso no seremos pobres motas de polvo extraviadas en el vasto universo? Alcázar ha aceptado el desafío de brindarnos respuestas. Este antivirus será un revulsivo para liberar nuestra mente de prejuicios y falsos razonamientos; una ayuda para entrenarse en el hábito de pensar por uno mismo y evitar ser blanco fácil de la tomadura de pelo. Solo despejado el camino podremos iniciar la andadura.